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sábado, 16 de enero de 2016

El trabajo de investigador privado no se subcontrata (parte VI)


SONGDOKU - Do you know this song? (122)

En un orden menor, sucede algo curioso, sin duda, con las llamadas telefónicas equivocadas, -cada vez menos, por operar con números en su mayoría, memorizados o pregrabados-, que por algún extraño motivo u oculta razón, desoyendo la orden de su destino inicial, se desvían, y, lejos de contactar con su interlocutor deseado, recalan en ti, prefiriéndote, cuando existen tan pocas posibilidades, en esta segunda instancia, de ser tu el elegido.

Aduzco el providencial error como última oportunidad, en una forma de resistencia, de aplazar la comunicación de una noticia inconveniente; evitar la respuesta de una decisión precipitada; ceder en una discusión no correspondiendote la iniciativa, o, preservar la intimidad y tranquilidad de alguien no estando en condiciones de aceptar la llamada, y sus hados protectores, la entorpecen, retrasandola.

Es una enmienda a la totalidad que se dispara, -a la manera de válvula de seguridad o red de salvación en las evoluciones de los trapecistas-, para subsanar errores evitando males mayores.

Trato de imaginar cuantos conflictos se habrán disipado con motivo de esta confusión, pues atendido por alguien ajeno al tema, quizás, recapacitas y caes en la cuenta que proseguir con tu objetivo, no era la mejor opción, y acabas desistimandolo.

La situación es similar a esa otra, donde acalorados por una discusión o impactados por una noticia, barajamos la posibilidad de reaccionar de forma impulsiva, sin previo análisis, mientras si aplazamos la réplica al siguiente día, la noche/la almohada,  con su acción  restauradora nos proporciona una visión de la circunstancia totalmente diferente, e incluso lo que nos preocupaba ha acabado por desvanecerse.


Ya tenemos el primer Cd para colgarlo del techo de mi terraza, con un hilo de seda, creando un ambiente playero, y, ahuyentar a las palomas. 
Podría parecer incongruente cuando se trata de un excelente guitarrista reputado, que tiene en su curriculum vitae pertenecer a las huestes de Chico Hamilton, y una aceptable obra corta propia, pero, son cosas del directo, aunque suene a disculpa. (Que los interpretes van cargados de copas o las copas cargan al público, o cargados ambos, hasta se escoge mal el repertorio.) El ambiente los pierde. Se gana en proximidad en perjuicio del resultado. La gente va predispuesta, entregada, y cuenta más, "el yo estuve allí", -el participar de la liturgia-, el asistir, que lo que allí se sustancia. Y en esas estamos. Se salva la canción del  pie de caratula, que es, toque seguro, un clásico de Jobim.



Hay que resaltar en Gábor Szabó, su ejemplo de tenacidad y valentía. Siendo muy joven, cogió su guitarra, y, de su Hungría natal, marchó a EEUU, toma ya!. (Si la montaña no se mueve, te toca moverte a ti, se diría.) De otro modo, no lo hubiéramos conocido pues no sería  popular. Tras aventurarse, todo lo demás es pan integral comido. Claro, que con esa fibrada pinta de agente secreto, podría, perfectamente, haberse postulado para el papel de otro nuevo James Bond.
(Hay gente a quien le sienta bien el cuello cisne, mandan huevos. Como a Gábor o a Jimmy Smith. Yo lo prohibiría, sino estuviera prohibido prohibir).

miércoles, 14 de agosto de 2013

GABOR SZABO - The Sorcerer/More Sorcery


Vamos a presentar este The Sorcerer (hechicero) en un directo, que ya sabemos para que son los directos, para epatar (dejar pasmado) a un público, generalmente, entregado, pero se trata de un artista, de un profesional, que a estas alturas de su carrera ya se podía conceder ciertos lujos y el trabajo de base, de campo, de estudio en diferentes formaciones y grupos ya estaba hecho. 

En la re-edición incluyen, conjuntamente otro Lp de este mismo año, 1967, More Sorcery, donde como su propio nombre indica, nos brinda otra sesión de más brujería. En conjunto, resulta muy interesante y oportuna para divulgar la obra de este magnífico guitarrista con los alti bajos naturales, según preferencias y gustos, y los guiños obligados del directo. Scott Feather.-All Music Kie.

Canciones:
The Beat Goes On
Little Boat (O Barqunho)
Lou-ise
What Is The Thing Called Love?
Space
Stronger Than Us
Mizrab
Comin' Back

Los Matadores
People
Corcovado
Lucy In The Sky With Diamonds
Spellbinder
Comin' Back

Personal:
Gabor Szabo, Jimmy Stewart, guitar
Lajos "Louis" Kabok, bass
Marty Morell, Bill Goodwin, drums
Hal Gordon, percussion

Comentario desechable e insustancial.

La crisis, esta crisis que estoicamente estamos soportando, tiene cientos de manifestaciones, además de las 
reivindicativas, -que también-, en el sentido de que se visualiza, por la aparición de negocios hasta ahora casi en desuso, como la vuelta de las tiendas de artículos de segunda mano, en auge, o, como comentaba el otro día, con la fiebre de re compra de oro y plata; con el trasiego permanente de infinidad de personas desfavorecidas carreteando chatarra en carros de compra de supermercado y con estampas de gente expulsada del sistema, malviviendo en las calles, transportando sus escasas y queridas pertenencias, errantes, de una forma dolorosa y lacerante.

Pero bueno, yo quería hablarles, una vez dibujado el paisaje, de una nueva forma de paliar la situación. Un sistema de obtener unos "extras".

Observo, con cierta frecuencia, un hervidero de personas mayores, retirados, que de una forma anárquica peinan las calles en busca de cabinas telefónicas o expendedores de tickets de parquimetro. El objetivo está claro: aprovechar que los usuarios reales, ocupados en gestiones que exigen su inmediata resolución, azorados, puedan olvidar o descuidar, en el cajetín de retorno, algunas monedas, bien sea, por el mal funcionamiento de la máquina o por el desconocimiento de su uso.

Aquí es donde entra nuestro desocupado. Traquetea varias veces la tapa si la hubiera, para provocar su vómito o, simplemente, introduce con eficiencia y pulcritud dos dedos de su mano en el agujero de devolución, en un gesto que recuerda a la función de libación de las abejas.

Preguntado un merodeador en plena faena si el asunto es rentable, si vale la pena, si da, como se dice en su argot, le costó reconocerme que sí, viendo, quizás, en mi, la sombra de un posible competidor.




The Beat Goes On
People
Stronger Than Us
Lou-ise
Corcovado

Lucy InThe Sky With Diamonds