Está claro que si estás ocupado, afortunadamente, en alguna actividad laboral, y, tienes la música sólo como hobby, tu no puedes alcanzar todo lo editado en todos los géneros, y, quedan tu conocimientos expuestos, en cierta medida, a la casualidad. Con lo cual se te escapan, a buen seguro, trabajos e intérpretes que merecerían mayor atención y mejor suerte. Este es mi caso con Art Farmer. Reconozco que es un fuera de serie, pero me he circunscrito sólo y exclusivamente a este LP. Se de su numerosas asociaciones con Hall, Golson, incluso con Quincy Jones, pero, me es materialmente imposible, dedicarle más tiempo, y, me resisto con el convencimiento de que, nada, va a superar a este trabajo. Esta producción dirigida por Oliver Nelson es una joya. Está arropado por una magnífica y numerosa orquesta y la elección de las canciones es acertadísima. Por tanto, cumplo, con agrado, el mandato de su título.
Los maestros:
Art Farmer (flh)
Ray Copeland, Rolf Ericson, Bernie Glow, Ernie Royal, Paul Serrano, Clark Terry, Snooky Young (t)
Jimmy Cleveland, Urbie Green, Tommy Mitchell (tb)
Paul Faulise, Tony Studd (btb)
Ray Alonge, Jimmy Buffintong, Robert Northern (frh)
Danny Bank, Ray Beckenstein, Phil Bodner, Walt Lewinsky, Romeo Penque, Stan Webb, Phil Woods (reeds)
Con una plantilla como la que sigue, todas las estrellas de la antigua Verve Records, en una producción de Creed Taylor, bien se puede hacer un gran trabajo.
Oliver Nelson - arranger, conductor, alto saxophone, tenor saxophone
George Duvivier - bass
Ed Shaughnessy - drums
Ray Alonge - French horn
Jimmy Raney - guitar
Al Cohn, Danny Bank, George Dorsey, Jerome Richardson, Jerry Dodgion, Phil Woods, Stan Webb - reeds
Paul Faulise, Willie Dennis, Rod Levitt, Quentin Jackson, Urbie Green, Tony Studd, Jimmy Cleveland - trombone
Clark Terry - trumpet, flugelhorn
Bernie Glow, Ernie Royal, Snooky Young, Jimmy Maxwell, Joe Newman, Clark Terry - trumpet
Verve V-8508
November 19, 1962
O cualquier parida vale para llamar la atención y estar atentos al tema. (Esta es la portada para el mercado latino de este super clase extra king size.)
Pues de eso se trata. De presentar la obra cumbre de la Bossa Nova. (La otra es Getz/Gilberto donde, por cierto, también participa Jobim.) Y añado más. Ahora va.
Es de tanta enjundia, categoría y aprovechamiento, que, ya, en las escuelas, se debería dar como materia de suma importancia, y los niños, desde chiquitines tendrían que saber sus doce canciones de carrerilla, con compositores y todo y hasta los componentes de la grabación incluido productor, fotógrafo y el que traía el agua. Bendita.
Esta es la capa para el mercado brasileiro. A lo que íbamos. Pues eso que los niños tendrían que aprender a parte de los rios rusos: Obi, Yenesei, Lena.....y tal, todos lo pormenores de este superdiscazo que es más bueno que el pan, integral, sin sal y con pepitas.(semillas)
Y esta es la funda para el mundo mundial.
Falta el bajo: George Duvivier.
Comentario final:
Estamos ante una pieza exquisita, irrepetible que entre otras utilidades sustituiría al libro sagrado para los agnósticos, que sellarían su compromiso ante una edición en vinilo y en lugar de la marcha nupcial de Mendelssohn, sonaría Jazz Samba del film Copacabana Palace.
O se consideraría como unidad de belleza y se emplearía para medirla; por ejemplo: ante un panorama imponentemente maravilloso o hecho insólito y descomunal, no se diría, esto es la leche, la ostia, o la repanocha, se emplearía, simplemente, esto es de una belleza o tiene una importancia de 50 Composer Plays. (El dígito es variable)
Por cuestiones económicas que no vienen al caso que se traducen en sobrante de liquidez y disponibilidad en tesorería, el presupuesto permite añadir como bonus track este video. Disfruten.